Recordando a mi hermanita Betty Noviembre 2023 (de mi mama)

Recordando a mi hermanita Betty Noviembre 2023

1939-2023

No dejan de venír a mi mente pequeñas viñetas e imágenes de aquella lejana época en que eramos las tres niñas del Rey - famosas en varios círculos por responder con palabras de 

cortesía que eran la norma y tarjeta de presentación en la casa del Rey-Leñero. 

                "Con mucho gusto"

                "Por favor" 

                "Sí fueres tan amable”
                “Muchas gracías"

                "Le ofrezco mil discupas"

                "Le agradezco mucho"

                "Discúlpeme"

                "Perdone usted" etc.  

En el Kinder en donde trabajaba la Tía Pepis sus compañeras le pedían que llevara a sus sobrinitás para que nos vieran comer usando los cubiertos a perfección. 

Era el orgullo de Mary de nuestrá Nanita, el traernos muy bien vestidas, con trajecitos iguales que ella inclusive nos compraba con su sueldo cuando mi mamá decía que no había dinero para estar comprando vestiditos. Mi Mamá siempre se estaba quejando de que Papaíto no le daba más dinero...Esa fue una obsesión de Mamá: Quería tener más dinero en sus manos, no sólamente en el Banco, ni en posesiones ni en una vida afluente ni acomodada...Mi pobre Mamá rica!

Todos los niños del Rey tuvímos la suerte de asistir as Colegio León, escuelita local, católica - en la época post revolucionaria de influencia laica. En la que el presidente Calles furiosamente combatía a las escueles crístianas. Todos nosotros recibimos excelente instrucción en el Colegio Refugio G. de León en todas las materias e inclusive las maestras nos prepararon para recibir nuestra Prímera Comunión. 

Cuando entré a Secundaria me dijeron que mi examen había obtenido el primer lugar entre cíentos de alumnus de todas las escuelas del D.F.

Ibamos caminando a la escuela pues nos quedaba cerquita, sobre la misma calle de Tuxpan. Era una casa adaptada por las señoritas León Lupe, Cuca, Queta y Elena la directora.

El Colegio era el sueño vuelto realidad de don Luis G León y su hermana Doña Refugio G de León y su esposo. Los tres estudieron y pusieron su talento junto para educar a la juventud Mexicana dentro de las normas de la decencia, la cultura y la religión católica.

A la salída de la escuela casi siempre Mary iba a recogernos y cargaba nuestros útiles (por lo menos algunos). Betty iba adelate bailoteando como mariposa y cantando las nueves cancioncitas que había aprendido como:

                   "Pollito = Chicken; 
                     Gallina = Hen; 

                     Te quiero = I love you;
                     Hello = Como está usted?"

Betty era muy risueña. Al sonrier se le hacián hoyitos en sus mejillas y mostraba sus dientecitos tan pequeños como los de Mamamita y de casi todos los del Rey. 

Cuando nos mudamos a San Angel, Teté y Betty ocuparon la recámera más alta en el tercer piso con linda vista hacia el templo de Nuestra Señora del Carmen y salida a la azotea.Tenía baño con regadera y ropero. Yo dormía en el mezzanine con el ropero antiguo y con la Nena. En la siguiente recamarita con ropero y cómoda estaban Yoyita con Mary. 

En el segundo piso estaban en las esquina viendo al jardin con la fuente. Cerca de ellos tambien viendo al jardin estaban Juan y Gabriel. Por el otro lado con la música de la calle Revolucción estaban Bol y Pepe.  

Vivímos grandes experiencias en San Angel en nuestra mejor edad y con muchos amigos.

Las distancias eran tremendas para ir a la escuela o para ir al centro. Excepto para ir a la universidad. 

Cada domingo íbamos con papaíto a Misa a la Congregación Mariana en la Sagrada Familia y después nos llevaba a desayunar a Sanborn’s junto con todas nuestras amiguitas. Enseguida del desayuno ibamos a nuestras misiones. Teté y Betty iban a visitar los asilos de ancianos. Juancho y sus amigos, Tócho, Manuel Enríque, Carlos Rodríguez, “Tell-me-Water”, iban a la Correccional. Yo con mis amigas iba a dar Catecismo, teníamos muchos centros de catiquesis, el mío era el de Tepito. 

Al fin de nuestra labor terminábamos en San Carlos #1 a la hora de la comida, allí estabamos muy puntuales todos los amigos de Juancho, mi hermano, junto con los de casa… Y se fueron quedando algunos…Yo me casé y mi esposo me llevó a vivir a San Francisco…Teté se casó …Betty se graduó de CPA de la ESCA…Tócho fue enviado a Tabasco. Oh aquí…se inicia otro capítulo.

Tócho se graduó de Ingeñero en la UNAM y fue enviado a trabajar a Tabsco en un lugar inclemente y selvático. Venía al D.F. a visitor a Betty y a su familia esporádicamente, quejándose amargamente de su suerte. Mientras tanto, Betty siete años menor, tenía otros amigos seguía estudiando…Cuando Tócho venía, ella aceptaba salir con él sin compromiso y así iba pasando el tiempo. Un día Tócho vino y Betty había salido con un muchacho… Al día siguiento llegó a San Carlos acompado de su hermano y un fraile a pedir la blanca mano de su bella dama.   

Me pidío Betty que: fuera su madrina de boda, lo cual me llenó de alegriá pero commencé a ver las dificultades:

1)la primera es que mi esposo había sido
    llamado a servico activo para
    la Fuerza Aérea US Air Force
    por el conflicto con Cuba. 

2)Segunda, teníamos dos bebés Ida Zara
    de dos años y John Leal de meses. 

3)Tercero, no tenía quien me ayudara
    a conseguir ropa adecuada para mi
    para ni para los niños para la boda. 

4)Económicamente también serían gastos
    inesperados muy inconveñientes. 

Pues, puse a funcionar mi máquina Singer y llegué a Mexico vestida decentemente con todo y pequeñitos muy elegantes para bendecir a los recién casados. 

El retorno a Sacramento fue aun más emocionante. Me enteré que Don Alfonso Ochoa, el papá de Mati iba a viajar a San Franciso ese día y me atreví a pedírle que me llevara a John Leal en brazos. El buen señor, Don Alfonso aceptó y solo así pude regresar a casa. Dios le de la Gloria a Don Alfonso. 

La vida de mi hermana Betty ha estado entretejida a la mía siempre auque hemos vivido en distintos paises y vivdo diferentes experiencias. Siempre hemos estado en contacto y guardado mucho cariño en nuestro corazón para cada una .Y para Tócho su esposo y sus hijos Betty, Guillermo, Cami, Juliana, David, Ana Violeta y Ana Victoria. 

Para todos estoy dejando estos recuerdos con mucho cariños. 

Tía Evis